sábado, 28 de septiembre de 2013

Barrancos, senderos y praderas: el Cabezo del Santo

Antes de acabar las fiestas de San Mateo el cuerpo pedía abandonar la marabunta y buscar la tranquilidad en la montaña. Que mejor lugar para lograrlo que la zona más abrupta de nuestras montañas, y que mejor montaña que una de nuestras más bellas: El Cabezo del Santo.

Enfrentando a "la santa cabeza". 
Hoy mi compañero de batalla es Edu, quien no conocía nada por esta zona de las Viniegras. Creo que al igual que yo ya la tiene en sus favoritos. 

Subiendo por el barranco Morcarizas.
En la ruta de hoy jugaremos a "rodear y conquistar" el cabezo del Santo, con un porcentaje de sendas y campo a través que hará que pasemos el 80% de la ruta fuera de caminos civilizados. Subiremos por el barranco de Morcarizas y luego por las campas hasta la cima, para bajar por el barranco de Linazas o barranco de Brieva. Había hecho los dos barrancos pero en rutas separadas, y hacía ya dos años desde que descubrí con Óscar el precioso barranco de Brieva, que en esa ocasión era en primavera y el monte estaba espectacular, había que volver y juntarlo todo!

Por el barranco de Brieva en primavera: ver entrada "Regreso al Cabezo del Santo"
Lo que mejor define a esta ruta es la palabra "intensa". Y es que casi no hay momento para relajarse, unos minutos después de salir de Brieva tomamos la pista que sube con fuerte pendiente hacia las laderas del cabezo, teniendo ya que meter todo y subir sufriendo para mantenerse encima de la bici. 


Tras algo algo así como media hora de subida por esta pista, llegamos a la zona alta de las peñas que flanquean el barranco morcarizas en su parte baja, y aquí ya dejamos la pista para comenzar con la interminable sesión de sendas que teníamos por delante.


Iremos perdiendo altura por sendas de vacas sin dificultad entre praderas aterrazadas, hasta acercarnos al arroyo, que iremos remontando suavemente y durante largo rato. 


La pendiente es suave en general, pero es una senda, y como tal tiene bastantes dificultades que harán que el ritmo sea lento. Sobre todo conforme se va subiendo, la senda se hace más pendiente y más complicada, pero muy ciclable si se encuentran los pasos buenos y se está inspirado!


Llegando al final del barranco, llega un tramo dónde desmontar ya se hace obligatorio, al menos si no eres "Kriss Akrigg" o cualquier mago del trial similar. Edu lo intentaba todo pero antes o después, toca empujar un tramito.


Sólo son una decenas de metros hasta salir de la zona pedregosa y entrar en unos lisos praderíos que ya permitían seguir montado sin ningún otro problema que la creciente pendiente. Hacemos una primera parada aquí para comer algo que ya llevamos un buen rato de bici y todavía queda una subida muy dura. Tras esta paradiña, retomamos las praderas y con un esfuerzo duro en las últimas rampas de hierva, salimos a la pista justo a la altura de las características "torrecillas". 


Después de rodar por las praderas dónde la bici se pega al suelo y parece que no te deja avanzar, la pista nos parecía una carretera llana. Aprovechamos para relajarnos y dejándonos llevar la seguimos, pero sólo unos pocos minutos, ya que tenemos que volver a las praderas para afrontar la subida al cabezo, al que no llega ningún camino ni senda. Intentamos perder el menor desnivel posible mientras nos acercamos hacia la zona del refugio de la lastrilla. 


Al ir hacia el refugio aparece una vereda así que la seguimos, y poco a poco se va desviando hacia arriba, hasta que nos hace desmontar y seguir a pie para llevarnos a dónde queríamos: las praderas de la cara suroeste del cabezo. ¡Vía libre a la cumbre!


Vía libre, pero no fácil... y no es que sea dura, es que es infernal! Subimos haciendo eses y aun así se hace complicado por la gran pendiente, que además va poco a poco aumentando mientras nosotros vamos quedándonos sin fuerzas...


Cada giro es una agonía en la parte más alta, y al estrecharse la pradera hay que hacerlos con más frecuencia, ¡¡ufff!!


Yo paré varias veces a respirar y bajar pulsaciones, y Edu paró algo menos pero supo ir más regular, y así poco a poco fuimos subiendo con mucho esfuerzo. Daban ganas de bajarse y empujar, y pensándolo creo que nos hubiese costado menos tiempo subir empujando que montados, pero somos muy cabezones así que hasta la cumbre a pedales:

Cima del Cabezo del Santo, 1.854 m.
Una gran liberación cuando llegamos a la cumbre, objetivo cumplido!! Además sabemos que por hoy las subidas de infarto se han acabado así que nos relajamos comentando las vistas a casi todas las montañas importantes de La Rioja: San Lorenzo, Urbión, Cebollera, Horquin, Moncalvillo y muchas más. Llevamos tres horas intensas pedaleando para llegar aquí, es hora de comer algo y reposar. El día está muy bueno con un poco de aire fresco, perfecto para el almuerzo!


Esta cima merece un buen rato allí arriba, está considerada la montaña más bella de La Rioja y no porque lo diga yo, el famoso blog de larioja.com "Ruta de Escape" también lo considera así, y Javier Urrutia de Mendikat también lo menciona en su "biblia de las montañas". Yo secundo la moción, ¡viva el cabezo!

Pero si esta montaña tiene esta consideración no es por su cima, es por el ambiente alpino de sus "faldas" y en especial, por los barrancos que la rodean. Si hemos subido por el bonito barranco de Morcarizas, ahora bajaremos buscando el espectacular barranco de Linazas también llamado del río Brieva.

Estrechamiendo del barranco de Linazas - Brieva.
Antes de meternos de lleno en el barranco debemos bajar de la cima del cabezo, y lo haremos por la cara sureste, sin seguir ninguna senda, simplemente rodando por encima de las piedras mientras seas capaz de seguir montado...


Sálvese quien pueda! Edu y yo nos vamos separando siguiendo cada uno nuestra propia "linea", con algunos tramos más normales, y otros dónde hay que saber lo que haces...


Con alguna que otra interrupción y un revolcón por cabeza, y tras haber generado adrenalina como para revivir a los muertos, salimos de nuestro particular "sea of rocks", como lo llamarían en las revistas, para entrar en unos perfectos prados dónde cambiamos la velocidad absurda por el descenso sin frenos a más de 40 km/h que nos dejará en la cabecera del barranco.


¡Esto es lo que yo llamo "freeride"! Menudo comienzo de bajada más intenso, y es que como decía antes, esa es la palabra que define esta ruta. Y lo seguirá haciendo porque una vez llegamos al comienzo del barranco, empezaremos a seguir difusas sendas por ambas orillas, con tramos sencillos y otros muy complicados para completar sobre la bici.


Esta será nuestra tónica general para los próximos kilómetros de senda, los cuales nos llevará más de una hora de diversión completar mientras descubrimos uno de los barrancos más espectaculares de nuestra tierra.


Vamos intentando ciclar todo lo posible, encontrando tramos de lo más trialero que exigen un dominio muy alto para superarlos, no lo conseguimos siempre pero no damos más de dos pasos sin volver a montarnos y seguir peleándolos.


Edu demuestra buen dominio de la bici en estos tramos trialeros, la está gozando al igual que yo que este tipo de sendas me encanta. Y a pesar de ser el inicio de otoño, el arroyo lleva un pequeño caudal para seguir haciendo aun más bonito este barranco, con pequeñas cascadas y pozas que se abren paso en este caos de roca. 


Deberemos cruzar varias veces el arroyo mientras al igual que él, la senda se va abriendo paso entre la maraña de rocas que salpican este valle.


Cuando el barranco se hace más abrupto la senda abandona el fondo y ladea por su orilla derecha, ya con más tramos sencillos primero entre espesos arbustos (que han sido desbrozados recientemente dejando las senda perfecta para su tránsito), para después entrar en una zona de monte más bajo.


Una rotura de la válvula de la rueda trasera de Edu nos hace parar durante un rato para arreglar este contratiempo, con una cámara se soluciona y podemos continuar dando pedales por este barranco que parece no tener fin.


La senda tiene tramos muy buenos con zonas más rápidas, otras lentas con piedras, curvas rápidas y curvas lentas, repechos de subida y toboganes de bajada, zonas llanas sin dificultad y zonas llanas de pelea... lo que se dice un master completo en MTB!


Tras más de dos horas desde que empezamos a bajar del cabezo del santo llegamos a las fuentes del río Brieva, de las que se puede beber agua sin ningún miedo. En esta ruta puede ser difícil encontrar agua potable en toda ella por lo que hay que ir bien aprovisionado. Preguntamos en el pueblo dónde se podría coger agua y nos comentaron que en las fuentes que manan a los lados del barranco principal, pero sólo encontramos un arroyo en la zona más embarrancada que tuviese caudal suficiente para poder coger agua, ya tras más de 4 horas de ruta. En primavera será más fácil encontrar agua, es un detalle a tener en cuenta.

Ya desde las fuentes terminaremos por bajar al pueblo por la senda que va por la orilla izquierda, acabando con esta intensísima ruta. Sin duda queda guardada entre mis favoritas por sus espectaculares paisajes e interminables sendas, 5 estrellas.

Track. Dificultad técnica Muy Alta. Duración: 4:30-6:30 horas. Un par de tramos no ciclables en la subida de menos de 5 min cada uno, más varios pasos puntuales. La subida por las praderas al cabezo es agónica, si no te sobran fuerzas sube empujando. La bajada tiene muchos puntos difícilmente ciclables dependiendo de la técnica. Mejor época en primavera y principio de verano.

martes, 17 de septiembre de 2013

Cumbres y Valles de la Demanda: Senda del Barranco Rigüelo

El verano se va acabando pero el tiempo en esta época resulta perfecto para darle a los pedales, las mañanas son frescas pero no heladas y el sol calienta pero no quema... hay que aprovecharlo así que nos animamos a subir a Valvanera  para acercarnos a las cumbres de La Demanda:

Sonrisas a 1700 m de altura. Se nota que la subida prácticamente había acabado.
La ruta de hoy será una de nuestras "clásicas", aunque hace ya casi dos años que no la hacíamos y además en aquella ocasión una batida nos la chafó bastante (http://albpozo.blogspot.com.es/2011/11/sendas-de-valvanera.html). Ya tocaba repetir y este sábado se presentaba como un buen día para ello. Salimos de Valvanera para sin calentar empezar a subir por la buena pero también dura pista.

Primeros tramos de subida entre los bosques de valvanera. Foto de Óscar.
Enseguida entramos en calor porque a pesar de los escasos 10ºC que había en valvanera, la subida es a la solana y sobra toda la ropa.


Tras una primera media hora dura la pista nos da algunos descansos y se hace más llevadera hasta que tras una hora de pedaleo alcanzaremos el cumbreo que nos separa del valle de Tobía, enfilando ya hacia los pancrudos.


Tras un tramo de bajada corto nos esperan las dos rampas más fuertes del día, las afrontamos con ánimo sabiendo que son casi las últimas, plantándonos muy cerca de la cota de 1700 m. Desde aquí nos acercamos al collado de Ocijo por una pista con pendientes muy suaves que te permiten ir tranquilo y contemplar las vistas.


Y así, tras algo menos de dos horas desde que salimos, llegamos a nuestra cima de hoy: el collado de Ocijo y sus 1731 m. de altitud. Hora de descanso y de almorzar, se estaba de vicio allí arriba.

En primer plano la cresta del pico Sanchon, y en la siguiente se ve la pista "mortirolo" que sube desde Mansilla 1000 m de desnivel, recomendable para los más "motivados" ;)
Como veis en la foto en esta ocasión nos juntamos un grupo de 6 jabalís más el que escribe: los habituales Diego y Óscar, Fran que se re-engancha, Sergio "cumbres" que ya no quiere perderse una; Edu que también está cogiendo el gusto y su primo Roberto que se estrena oficialmente con nosotros. Buena grupeta para pasar la mañana, sólo 3 conocíamos la bajada así que los demás están expectantes ante los 800 m de desnivel que debemos bajar hasta cerca de la venta de Goyo.

¡¡¡Vamos p'abajo!!!
La bajada comienza por una pista muy rápida con piedra suelta para darle emoción, hay que estar atentos porque el GR deja esta pista y sigue bajando por una vieja trocha también con lajas sueltas y dónde ya no se puede correr. Poco a poco la senda se va naturalizando y dejando la piedra suelta para entrar en zona de robledal.


Tras llegar a unas campas tenemos un primer tramo de curvas cerradas dónde la senda se hace más divertida, rodando entre las escobas y los robles.


Volvemos a coger otro tramo más recto pero que se interna en una zona más húmeda dónde aparece mucha vegetación incluidas bastantes zarzas que hacen este tramo incómodo y discontinuo. Esperemos que no tarden en pasar a limpiar el GR porque lo está pidiendo ya.


Por suerte este tramo es corto y nos deja en otra sucesión de curvas cerradas con tramos muy bonitos y divertidos dónde ya no hay problema para rodar y disfrutar.


Tras abrirse un poco la vegetación, de nuevo hay que estar atentos porque la senda más marcada sigue hacia delante sin perder cota, mientras el GR gira en una curva de 180º para caer en picado hacia el valle.

Sergio señala el camino: hay que bajar ahí abajo, ¡queda lo mejor!
Comienza el tramo más técnico por tener unas cuantas curvas muy muy cerradas algunas, y muy escalonadas otras...

Diego se tira sin miedo en esta curva aderezada con piedra.
Edu nos da una lección de técnica trialera en las curvas cerradas que todos vamos pasando algunos con más suerte que otros, imprescindible mover la rueda de atrás para pasar varias de estas zetas.


Estamos ya muy cerca del río y ahora la senda irá paralela a él cruzándolo en varias ocasiones por unos bonitos puentes de madera, en un entorno de vegetación exuberante y mucha humedad.


Este tramo final junto al río es el más bonito de rodar y pone una gran guinda a esta larga bajada que sin duda va de menos a más para acabar con lo mejor.


La senda acaba en la carretera del najerilla, por la que regresaremos rodando tranquilamente al inicio, en nuestro caso aprovechamos la cantidad de gente que estábamos hoy para dejar a la ida un coche en el cruce de la carretera de Valvanera y así nos evitamos subir estos kilómetros finales, es lo que yo llamo "optimización de recursos" ;)

Track. (Incluye un bucle en Valvanera por la senda del canal, ver la entrada "Sendas de Valvanera"). Duracion: 3:30 - 5:00 h (sin bucle incial 30 min menos). Dificultad técnica: Media-Alta. La bajada principal por el GR es dificultad media con algunas curvas cerradas difíciles. Sin problema de barro.


domingo, 8 de septiembre de 2013

4ª Ruta Lúdico Endurera Morella Singletracks

Segundo día en Morella y hoy nos preparamos para la marcha que los amigos de Morella han organizado para promocionar sus "singletracks", es decir, sus senderos. Es la 4ª que llevan a cabo y el público ha respondido juntándonos 90 bicis, la mayor cantidad hasta la fecha, seguro que seguirán aumentando en próximas convocatorias.


Para hacer una ruta más vistosa y lejana a las sendas más habituales cerca del pueblo, nos montamos en dos autobuses y sus correspondientes dos camiones para llevar las bicis y nos dejan en un parque eólico desde el que se dará la salida de esta ruta lineal de vuelta hasta Morella.

Allí al fondo está Morella, ¿la veís? ¡a por ella!
Hoy nos vamos a juntar cuatro riojanos ya que se nos ha unido Sergio desde Nájera y Carlos alias "Cabra Tormantina", un viejo conocido que está "exiliado" en Valencia desde hace años y con quien a través del foromtb había mantenido el contacto, apuntándose sin dudarlo en cuanto supo que nos acercábamos por allí.

Riojanos en Morella. Carlos lleva nuestra bandera y su pueblo siempre con él y no podría faltar en esta ruta, con Morella al fondo.
Además de encontrarnos con Carlos, conocemos a algunos foreros más mientras esperamos la salida de la ruta. Debido a la cantidad de gente y a que la ruta comienza por una técnica senda en bajada, los atascos son inevitables, la impaciencia nos puede a todos...


Intentamos ir dejando espacio a los que van delante y poco a poco el grupo va estirándose y permitiendo rodar de forma continua, empezando por una senda que a pesar de ser bajada ya te calienta el cuerpo a base de curvas, piedras y escalones...


Pasamos por el pueblo de Castellfort, y remontamos por carretera, senda y pista de nuevo hasta las cumbres que antes habíamos dejado:


Pasamos por una ermita de la que ya el día anterior nos habían puesto como referencia de inicio de la segunda bajada del día, la más larga. De nuevo hay atascos así que aprovechamos este mirador para hacernos unas fotos, con la característica silueta de Morella al fondo.


Y también vemos el fondo de este barranco, hacia donde nos bajará la senda... tiene buena pinta!


Así de cháchara nos llega el turno, se ha ido despejando la salida y nos lanzamos a por ella.


Terreno de mucha piedra, losas y escalones... esto empieza bien!


Pero lo más difícil sin duda son las curvas de este inicio, zetas que entra la pendiente y el terreno había que estar muy hábil para pasar.


Tras este inicio que nos puso las pilas, la senda continúa menos retorcida pero igualmente cañera, con mucha piedra suelta y zonas de escalones que te mantenían atento al 100%.


Hay algunos vídeos que ha subido la gente a youtube de esta senda, os dejo un par de ellos que yo he visto, como suele pasar, parece más fácil en los videos de lo que es... http://www.youtube.com/watch?v=Yy4Ku26L5uI - http://www.youtube.com/watch?v=lqmXE6sQ-xc

Durante la bajada el terreno tan duro dió lugar a algunos pinchazos y a una pequeña explosión que a los que nos pilló cerca nos pareció un disparo, pero que resultó ser un tubeless destalonao, uf! Por suerte los riojanos pasamos sin más problema esta larga senda, cuya segunda parte es más rápida para soltar frenos y acaba en un camino en el fondo del valle dónde nos reagrupamos y sacamos el almuerzo. Y que es lo que no puede faltar en un buen almuerzo a la riojana....


El amigo Carlos llevó nuestro mejor representante, un buen vino en su correspondiente bota, que enseguida empezó a rular entre los asistentes con el cachondeo correspondiente. Vamos comiendo algo que el vino sólo no es bueno para dar pedales! Por algo llaman a estas rutas "lúdico-endureras" ;)

Tras una buena cháchara reanudamos la marcha para por buenas pistas ir remontando la ladera contraria del barranco.


Tenemos varios kilómetros de pistas por delante, pasando por otro pequeño pueblo rodeado de muros para el ganado, se nota que la zona mantiene el ambiente tradicional muy rural.


Continuamos durante varios kilómetros más y ahora nos tocará un tramo de bajada que nos meterá en un bonito barranco dónde iremos cruzando el arroyo seco varias veces mientras circulamos por un camino bueno que nos permite ir rapidillos.


Al salir de este barranco a una zona más abierta nos tocará continuar por caminos hasta desviarnos a coger una cañada que en subida empezará a añadir dificultad a este tramo, toca meter el plato pequeño y darle fuerte para ir superando escalones de piedra.


La subida es corta pero intensa, continuamos por la caña en un tramo más llano y en descenso pero también con piedra y escalones para hacerlo más divertido. Acabamos cruzando un barranco con un tramo de fuerte bajada seguido de una empinada subida dónde hay gente que empieza a flaquear, y lo malo es que aun quedaba un buen tramo por esta cañada, que sin tener mucha pendiente picaba hacia arriba y tenía tramos muy rotos que exigían mucho para superarlos.


Estando con fuerzas esta senda es bonita y divertida, Óscar, Sergio y yo vamos bien y nos picamos a ir pasando todo montados, y había pasos realmente dificiles...

Foto de Morella Singletracks: Todas sus fotos aquí.
Esta bonita subida nos saca a un collado desde el que vemos ya Morella en frente, sólo queda una última bajada y la subida al pueblo, es buen momento para parar y hacerse unas fotos con el pueblo al fondo como la que os he puesto al principio, pero también para dar otro trago a esa bota, no puede ser que aun no esté vacía!!

Sergio pimplando antes de la última bajada, seguro que le ayudó a soltar frenos con más alegría ;)
Muy buena bajada la que teníamos por delante, tramos rápidos seguidos de tramos más técnicos y buenos escalones y piedras, empezamos a pensar que aquí todas las sendas son así!

Foto de Óscar.
Ver el pueblo cerca le dió fuerzas a todo el mundo e hizo que disfrutásemos más la bajada, ya era la última...


Pero quedaba subir, y es que cómo ya nos habían advertido, Morella es "dónde siempre terminas cuesta arriba". Enfilamos la cuesta hacia el pueblo sabiendo que es el último esfuerzo, no queda naaaa!!


Cuando ya parecía que habíamos pasado lo peor y veíamos las murallas cerca, el buen firme se convierte en un empedrado con pequeños escalones, uf!! Algunos se rinden pero los riojanos dejamos alto el pabellón subiendo todo lo posible montados.


Por fin entramos en el pueblo! Aunque tras la ducha la organización nos había preparado una comida de hermandad donde pudimos comentar las batallitas con los demás bikers y con nuestros amigos de la organización. Acabamos encantados y con ganas de más, seguiremos atentos a las nuevas propuestas que organicen desde Morella que seguro serán igualmente interesantes, ¡hasta la próxima!