Bucesta - Reinares: Abandonados

Preciosa y muy vistosa ruta por el corazón de la "alpujarra riojana", es decir, los valles y montes perdidos entre el jubera y el leza. Una zona muy bonita para la bici por estar tan olvidada e "incivilizada", tanto que sus habitantes hace tiempo decidieron abandonarlo todo y por ello han quedado varios pueblos deshabitados o casi, aunque poco a poco algunos vuelven a resurgir. No es el caso de los dos pueblos que visitamos en esta ruta, Bucesta y Reinares. El primero se resiste al abandono total y todavía queda alguna casa en pie. El segundo está totalmente abandonado y en ruinas, y en un lugar de acceso dificil, perdido entre robledales.

Lo interesante de la ruta comienza subiendo por la pista de Zenzano, pero desviándonos dirección Santa Cecilia y sin bajar al pueblo siguiendo por la pista hacia Bucesta. La pista va cogiendo altura y nos ofrece grandes vistas del valle:

Se rueda bien por la pista y nos lleva sin complicaciones hasta Bucesta, que como he comentado resiste al abandono total, pero la mayoría de las casas están en ruinas.

Seguimos la pista y badeamos un arrollo para seguir remontando el valle del río Santa Engracia. En una curva pronunciada, dejamos la pista y continuamos por una antigua senda. Al principio es poco ciclable, pero pronto va mejorando y nos permite disfrutar del camino, aunque sin dejar de mirar al suelo ya que en general es una senda técnica y en la que hay que pedalear.

Vamos ladeando la montaña y se van sucediendo las zonas abiertas y los robledales:

Tras un par de kilómetros llegamos a Reinares:

Pueblo completamente abandonado y en ruinas, da la sensación al visitante de estar totalmente perdido y en otra época. Sin duda un lugar que merece la pena visitar.

Tras parar a contemplar el pueblo continuamos la marcha, saliendo dirección Santa Marina, para lo que cruzamos la única estructura que se mantiene en buen estado de este pueblo: el puente.

Continuamos por la antigua senda que unía Reinares con Santa Marina, adentrándonos en otro robledal muy bonito.

Tras cruzar un arrollo, seguimos por una pista que nos saca a la carretera de Santa Marina, desde la que regresamos a casa con el deber cumplido.

Ruta muy recomendable, especialmente la visita a Reinares.

Nos vemos.